Churreria Dickens Cafe

La calidad de las porras y churros es pésima, para ser las porras más caras de la zona es incomprensible. La camarera, además de desagradable se suele equivocar con los precios y te cobra lo que le da la gana, y cuando se lo dices todavía te lo rebate.

Unas porras saladisimas y aceitosas q no se las comen ni los perros. Sin duda las peores porras q he comido no volveremos.

Las porras tienen mucha grasa y el café está malisimo, apenas pude tomar medio.

La camarera más maleducada y desagradable que te puedes echar a la cara. Siendo celíaca, el dueño siempre me ha dejado comer algo sin gluten algo de la tienda de al lado porque ellos no tienen oferta sin gluten. Sin embargo, la camarera, además de mirarte como un bicho raro, te desprecia y te ningunea. Diciendo, con asco, q no puedes comer nada. ¡¡¡¡No volveré!!!

La camarera borde y antipatica ensombrece la experiencia. Pensábamos desayunar, y una persona celíaca le preguntó si podía tomar un producto sin gluten que traía consigo porque en el establecimiento no disponen de estos productos. De mala manera, altiva y prepotentemente nos dice que bueno, que no suelen dejar pero que se lo coma si quiere... (dicho sea que siempre preguntamos, y el dueño siempre le ha dicho que sí podía, pero no por ello dejamos de preguntar, por educación). Visto el panorama preferimos cambiar de planes y pedir que nos pongan para llevar el resto de los productos que habíamos pedido. Al decirlo, la malencarada de la camarera se da la vuelta y se marcha mascullando: "poh vale, adiós". Ya no se lo tolero y le digo que es una maleducada, así que al final ni desayuno, ni para llevar, ni nada. En todo momento nuestro trato hacia ella ha sido educado, por lo que no entendemos la altivez y la actitud de perdonarnos la vida por parte de esa mujer. La gente de este tipo lo único que hace es alimentar a la competencia, y no será por falta de churrerías en San Fernando. El dueño bien podía tomar nota, que yo no gano nada con esta crítica, nosotros sólo queríamos desayunar, y si tiene la idea de despreciar estos comentarios, adelante, que lo haga, y que siga consintiendo que esa señora vaya poniendo cara de perro a la gente que va a dejar el dinero en su casa. Desde luego, aunque a usted le dé igual, no volveremos por su casa. Igual si más gente empieza a ver más sitios (que los hay y bien cerquita)y deja de recibir visitas, empieza a ver el problema de tener a semejante persona atendiendo a quien le da de comer. PD: pasamos días después delante del sitio y la camarera seguía en su línea de tratar a la gente con cara de asco. Confirmo que no piso este sitio ni aunque me regalen los churros mientras esa señora siga ahí.

Lo peor de lo peor,porras y churros fríos y precios elevados Mala educación por parte de los empleados

Muy amables y churros y porras buenisimos

Tuvimos que ir a San Fernando a realizar unas gestiones y a falta de otros sitios acabamos aquí. Tapas abundantes y ricas y el camarero muy atento con nosotros, además tiene Puna terracita donde se está muy agusto. Si por algún motivo vuelvo a San Fernando volveré aquí.